El Instituto Educativo Betel existe para hacer una contribución a la comunidad, entendiendo que a cada generación le corresponde la tarea de equipar a la próxima con aquellos conocimientos y valores que les permitan un pleno desarrollo. Por eso consideramos que la creación de un colegio es una herramienta para lograr ambos fines, por cuanto en una institución educativa se puede crear un ambiente favorable para que los alumnos se apropien de aprendizajes significativos, desarrollen capacidades, actitudes y valores que transformen su vida y se conviertan en ciudadanos que con sus acciones causen un impacto positivo en la sociedad y los entornos en los que se desempeñen.

Nuestra convicción detrás de todo lo que hacemos es que, si logramos impartir de manera genuina aquellos valores cristianos como el amor al prójimo, la cultura de trabajo y el respeto a la autoridad, y al mismo tiempo brindamos un nivel educativo excelente que prepare a cada alumno con las habilidades necesarias para enfrentar los cambios, desafíos y exigencias que tengan por delante, estaremos haciendo una contribución significativa y dejando un legado digno a la siguiente generación.

 

Tener una filosofía institucional basada en la Biblia, creando así un ambiente donde se posibilita celebrar la fe y el nombre de Dios con libertad y donde los conflictos se resuelvan en el marco de amor y perdón que él enseña.

 

Con directivos, docentes y personal asociado que se destaque por su trabajo en equipo, vocación de servicio, amabilidad y capacitación permanente, como así también por su compromiso con el propósito institucional de impartir los principios de vida cristiana en todo lo que hacen.

 

Que las instalaciones del Instituto Educativo Betel sean amplias, seguras y luminosas. Que la tecnología esté siempre presente al servicio de programas audiovisuales innovadores que despierten el interés y la motivación de los alumnos y que la formación espiritual impartida esté orientada a que cada uno de ellos pueda desarrollar una relación personal con Dios e incorpore principios prácticos que le lleven a ser una persona íntegra, generosa y que honre a las autoridades.

 

Aspiramos a que los padres y tutores cuenten con un programa de entrenamiento y consejería que la Escuela ponga a su disposición para el mejor desempeño de su rol.

De esta manera Betel se proyecta como un aliado para aquellos que han decidido que sus hijos serán parte de una generación de hombres y mujeres capaces e íntegros.